Estas son las ventajas de contar con zona de lavado cerca de tu cocina
La limpieza y la higiene son básicas en cualquier hogar. La zona del lavado es un espacio al que no se suele prestar mucha atención a la hora de hacer la distribución de una casa, sin embargo es algo en lo que hay que fijarse.
Ubicar cerca de la cocina esta zona tan importante es muy recomendable, ya que ambas son estancias en las que el agua es el elemento más relevante.
Situar la zona de lavado en la zona de los dormitorios o del salón no traerá más que problemas, ya que la humedad podría estropear muebles y textiles cuyo diseño no está preparado para ello.
Zona de lavado: funcionalidad y estética
El hecho de que la zona de lavado tenga una función eminentemente práctica no quita que pueda ser decorada armónicamente con el resto de la casa, especialmente de la cocina si es esta estancia la más cercana.
La estética no debe desentonar con el conjunto, por lo que la zona de lavado nunca debe quedar fuera del estilo decorativo elegido para una casa nueva o para la reforma de una casa antigua.
Cómo integrar la zona de lavado en la cocina
Contar con una zona de lavado y planchado anexa a la cocina es posible siempre y cuando se puedan ganar espacios extras como un aseo, una terraza o un cuarto.
Si la casa no cuenta con un cuarto de lavado, siempre se puede realizar una reforma, que muchas veces no requiere más que tirar un tabique y la habilitación del espacio, algo no excesivamente costoso.
Veamos algunas de las formas en las que puedes integrar la zona de lavado en la cocina.
Ambientes diferenciados
En espacios de planta alargada y ancha siempre se puede diferenciar la cocina de la zona de lavado mediante cerramientos acristalados, de forma que ambos ambientes estén separados pero unidos visualmente.
Zona de lavado en el interior de un armario
En muchas ocasiones el espacio de la cocina no permite el planteamiento anterior, por lo que una buena solución puede ser camuflar la zona de lavado con unas puertas plegables.
Para esto es necesario realizar una instalación de desagüe y toma de agua (en el caso de que no sea su ubicación original), y contar con una profundidad suficiente para poner los electrodomésticos.
Un espacio bien aprovechado
Ten siempre presente que en una zona de lavado necesitarás espacios para organizar la ropa y para almacenar los detergentes y productos de limpieza necesarios.
No pueden faltar unas baldas de diferentes tamaños, un tendedero y un fregadero.
Los electrodomésticos
La colocación de la lavadora y de la secadora dependerá del espacio disponible, pudiendo ser en línea (en espacios grandes) o en columna (en espacios pequeños). En el caso de que tengas que ponerlos en columna, lo más habitural es colocar la lavadora debajo de la secadora.
Como ves, a la hora de distribuir una casa hay que tener en cuenta hasta los más mínimos detalles. La zona de lavado, tan olvidada en muchas ocasiones, debe ser tenida en cuenta para su mayor funcionalidad y estética.
